‘Calidad para Crecer’ es la estrategia del Ministerio de Comercio, Industria y Turismo, en conjunto con Colombia Productiva y Bancóldex, creada para que empresas, unidades productivas y laboratorios conozcan, incorporen y eleven los estándares de calidad en sus productos y procesos, para así avanzar en su reactivación económica, mejoren su productividad y se preparen para aumentar las exportaciones.
Con impacto en empresas, unidades productivas y laboratorios, esta estrategia está compuesta por diversas convocatorias que permitirán a los empresarios del país acceder a proyectos especializados de formación, asistencia técnica, cofinanciación y financiación en temas de calidad, según sus necesidades.
La falta de calidad es uno de los cuellos de botella que impide a la industria y a sus empresas ser más productivas y exportar más. La calidad es la base de una empresa eficiente y con capacidad de competir dentro y fuera del país.
Pese a su importancia, en Colombia, según los resultados de la Encuesta de Desarrollo e Innovación Tecnológica (EDIT) adelantada por el DANE para el periodo 2017-2018 solo el 22% de las empresas encuestadas tiene certificaciones de calidad de proceso, aunque es de resaltar que representa un aumento frente a los resultados de la misma encuesta para el período 2013-2014 donde solo fue del 9,6%.
Cumplir estándares de calidad es la llave de acceso a los mercados internacionales. Se espera que, tras la pandemia por covid-19, los estándares de calidad para acceder a estos sean más exigentes e incluyan el cumplimiento de protocolos estrictos para mitigar riesgos de contagio de este virus y otras enfermedades.
Implementar estándares de calidad puede ayudar a reducir hasta en un 44% los productos no conformes y en un 56% los costos asociados a la falta de la calidad.
Los estándares de calidad son la principal herramienta con la que cuentan las empresas para lograr una alta productividad. Incentivar la cultura de la calidad en las empresas es clave en los procesos de reactivación económica y adaptación a la nueva coyuntura, ya que les permite contar con procesos eficientes que se adapten fácilmente a los retos del escenario comercial global, disminuyendo los riesgos de pérdidas económicas, empleos y cumpliendo las expectativas de los consumidores.
Los estándares les permiten la continuidad del negocio en épocas de crisis, ya que sus procesos están preparados para asumir situaciones de riesgo sin perder productividad.
Contar con estándares de calidad genera confianza en un mercado global donde cada día los consumidores son más exigentes a la hora de adquirir productos y servicios, con requerimientos que involucran que las empresas demuestren a través de sellos de calidad, que cuidan el ambiente, o que tienen prácticas de comercio justo o productos que aseguran el cuidado de la salud a través de su producción orgánica, entre muchos otros aspectos.